Especial ASNALA 8M: Desafíos y avances hacia la igualdad de género en el trabajo

El Índice de Igualdad de Género de la UE sitúa a España como el cuarto país con menos desigualdades dentro de la Unión Europea. Sin embargo, cuando se trata específicamente de desigualdad en el trabajo, España baja hasta el puesto número 17. Las entrevistadas coinciden en que estos datos son un indicativo más de que aún queda mucho por hacer para paliar la brecha de género en nuestro país.

María José Ramo, mediadora del Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje y profesora doctora en Derecho del Trabajo, señala que lograr la igualdad laboral no solo depende de los poderes públicos, sino que también requiere de un trabajo “desde las empresas y desde las familias”.

“Ya hemos visto que solo la consagración teórica de esa igualdad a nivel regulatorio, a pesar de la gran importancia que tiene, no ha funcionado para terminar con la desigualdad, por lo que serán necesarios mayores incentivos para las empresas y para las trabajadoras de cara a fomentar la incorporación al empleo de las mujeres y para impulsar su desarrollo profesional”, añade Alicia Moro, laboralista en Sagardoy Abogados.  

En este sentido, las entrevistadas identifican la corresponsabilidad como un factor de cambio fundamental en el camino hacia la igualdad laboral. “Los hombres deben ser corresponsables en los cuidados de los hijos y de los mayores dependientes. No puede ser que el 90% de las excedencias para el cuidado de hijos y mayores, así como las reducciones de jornada para ese mismo fin, sean solicitadas por las trabajadoras”, apunta María José Ramo.

Concepción González, graduada social y abogada, resalta también “la importancia de la corresponsabilidad en las tareas domésticas” como otro elemento determinante para lograr la igualdad laboral.

Ante este panorama, Pilar Cascón, abogada laboralista en Alliantia, explica que hay que “seguir insistiendo desde la educación en que la corresponsabilidad es fundamental para que las mujeres accedan a puestos de responsabilidad en igual número que los hombres. Solo así las empresas se adaptarán y podremos conseguir la igualdad efectiva”.

Análisis del presente y el futuro de la igualdad laboral en España

En los últimos años, el Gobierno ha aprobado diversas medidas con el objetivo de reducir la brecha entre mujeres y hombres en el mercado laboral español. Entre ellas, la obligación de empresas con 50 o más trabajadores de contar con un Plan de Igualdad.

“El propósito principal de estos planes es la formación, concienciación y educación en igualdad, que abarca desde el uso de un lenguaje más inclusivo hasta el fomento de la corresponsabilidad”, aclara Pilar Cascón. María José Ramo enfatiza que los beneficios de estos planes empiezan desde el momento en el que se plantea su implantación: “los planes de igualdad requieren realizar un diagnóstico previo sobre la situación específica de esa empresa en materia de igualdad de género. Esto es muy importante porque permite analizar en qué puestos están mayoritariamente las mujeres y qué diferencia salarial hay entre hombres y mujeres que ocupan puestos de trabajo equiparables”.

No obstante, Alicia Moro advierte que para que el Plan de Igualdad cumpla sus objetivos, la igualdad debe ser parte de la cultura corporativa de la empresa. De lo contrario, “este tipo de medidas se ve más como una obligación, un trámite, que como una ventaja para lograr el objetivo en las empresas”, aclara la laboralista.

Otra de las medidas más sonadas del año 2023, fue la aprobación de la Ley de Familias que introdujo una serie de medidas destinadas a mejorar la conciliación laboral y familiar. Entre ellas, el permiso especial por fuerza mayor o el permiso parental de ocho semanas. “Estas medidas pueden ser importantes para reducir la brecha de género en el mercado laboral al fomentar la corresponsabilidad. Asimismo, permiten a las mujeres dedicar más tiempo a la familia sin renunciar a su carrera profesional”, opina Concepción González.

Sin embargo, María José Ramo señala que, a pesar de los beneficios que plantean estas medidas, pueden acabar convirtiéndose en un arma de doble filo: “si la conciliación se interpreta como medidas que permiten atender la vida familiar y se acogen a esas medidas solo las mujeres, la propia conciliación acaba perjudicando a las mujeres”.

Por esta misma razón, Pilar Cascón y Alicia Moro consideran que la flexibilización del trabajo como un elemento fundamental para continuar avanzando en materia de igualdad. “Creo que las extensas jornadas partidas que aún tenemos en muchas empresas no ayudan a mantener una sociedad equilibrada”, explica Pilar Cascón.

No obstante, María José Ramo matiza que para que surta efecto, es necesario “seguir con políticas que incentiven que los hombres se acojan a las medidas de conciliación”. Además, Alicia Moro señala que “es necesaria la adecuación y especialización de las políticas activas de empleo para no solo incentivar la incorporación de la mujer al mercado de trabajo sino para mantener su carrera profesional, apoyando la promoción con medidas de fomento de la formación o la eliminación de la brecha salarial”.